Guadix, Granada capital, Tabernas… desde el cielo. Esta semana les proponemos una experiencia imborrable y una manera diferente de mirar nuestros paisajes. No les vamos a llevar tan lejos como Julio Verne en su ‘Vuelta al mundo en 80 días’, pero sí les aconsejamos que se suban a un globo para viajar a 300 metros de altura –se puede llegar hasta mil– sobre el suelo y sentirse como verdaderos pájaros.
Los aerostatos –el primer vuelo tripulado no se realizó hasta finales del siglo XVIII– tienen su funcionamiento basado en el principio de Arquímedes: aire caliente que genera un empuje en el seno del aire. Fueron los primeros aparatos que permitieron al hombre materializar sus sueños de volar, pero debido a la aparición del resto de aeronaves conocidas (aviones y aeronaves de alas giratorias), los aerostatos han quedado relegados mayoritariamente a unas funciones de carácter lúdico, deportivo o científico. Y de eso es precisamente de lo que les proponemos disfrutar.
De la mano de empresas como Glovento Sur el viajero puede volar sobre Guadix y su altiplano. La salida se hace al amanecer y el punto de encuentro es la explanada que hay delante de la catedral accitana. Primero se ve cómo se prepara el globo, que es en sí mismo un espectáculo. El recorrido suele durar una hora. La excursión en su conjunto unas cuatro. Al despegar no se sentirá una gran descarga de adrenalina, pero sí una agradable sensación, y después la tranquilidad y el silencio de viajar por el aire.
Una de las cosas que más impresiona, además de las bellas panorámicas, es la sensación de suavidad durante el vuelo.
Hay mil imágenes que se suceden en este singular paseo en globo que deja boquiabierto al viajero: las casas cueva de Guadix, los pueblos de Jérez del Marquesado, Purullena, las cumbres de Sierra Nevada y la Sierra de Cazorla, el poblado minero de Alquife… valles y montañas recortadas según el capricho de la naturaleza. Si el tiempo acompaña se puede volar al ras de los árboles.
Después del vuelo se desayuna y se entrega un diploma a los aventureros. Tras el desayuno queda mucho día para conocer, esta vez a pie, un poco más de Guadix y sus alrededores. Aunque hace calor el viajero puede refugiarse en las casas cueva y programar varias excursiones –hay empresas que organizan paseos a caballo, senderismo, rutas 4×4…–.
La capital granadina es otra de las zonas que se pueden sobrevolar en globo. En este caso sólo los fines de semana y cuando el tiempo acompañe. Se sale de San Miguel Alto y se aterriza en alguna zona de la Vega. Se suele atravesar toda la ciudad y se intenta sobrevolar la Alhambra, una vista de lujo. Si algún viajero está interesado en volar a alguna otra zona de la provincia granadina, jienense o almeriense se puede hacer la propuesta a la empresa, que estudiará si las condiciones acompañan. El pantano del Negratín o los Bermejales también son susceptibles de estos vuelos tranquilos, suaves y de una sensación de libertad única.
De cine
En Almería otra de las rutas habituales es la del desierto de Tabernas. La vistas son bastante homogéneas y al gran desierto sólo se suman algunas montañas cercanas a las zonas temáticas del Mini Hollywood y el resto de espacios cinematográficos. Después de volar se puede hacer una visita a estos parques y al día siguiente darse un chapuzón en alguna de sus extraordinarias playas. Viajero, aprovecha el verano para hacer algo diferente y vuela alto.