Los vestigios más antiguos del municipio se encuentran en el yacimiento argárico del Cerro del Coto. De la época islámica quedan restos, en el Cerro de la Torre, de un torreón vigía. La iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Anunciación se terminó de construir en 1705 y conserva un magnifico artesonado de estilo mudéjar. También merece reseñarse la casa solariega Cortijo de Preafán, que sigue habitada en la actualidad. Peculiaridades La madrugada de San Antón conoce todavía en este municipio el encendido de hogueras como signo de convivencia, alrededor de la cual se come la típica careta asada y se bebe el vino mosto. Otra tradición se ha perdido hace poco aunque se intenta recuperar. Se conoce con el nombre de Los Años y consiste en que durante la Nochevieja dos personas vendían papeletas con los nombres de los solteros y solteras del pueblo, para emparejarlas; al día siguiente, ellos acudían a las casas de ellas a ñcumplir el añoñ, llevando una botella de anís o de coñac y degustando con la familia los dulces propios de la Navidad.
Historia
Como todos los municipios enclavados en la llamada Hoya de Guadix, Huélago conoció asentamientos humanos desde las primeras civilizaciones de la Prehistoria en la península Ibérica; y así lo atestiguan los numerosos restos arqueológicos hallados en el entorno. No tuvo especial protagonismo, sin embargo, hasta la última época de la dominación musulmana en que por ubicarse en zona fronteriza sufrió con frecuencia el hostigamiento de los jinetes cristianos acuartelados en Cazorla, como ocurrió con toda la comarca. Conquistada por los Reyes Católicos en su camino hacia Granada, sufrió más tarde las duras consecuencias de la represión y expulsión que siguió al levantamiento morisco. Pasó por diversas jurisdicciones como el comendador García de Arana o el marqués de Villanueva de la Torres y señor de Huélago y Fonelas, uno de cuyos primeros titulares, Baltasar Afán de Ribera, costeó la construcción de la iglesia.